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La Deshidratación de la Piel Masculina

La piel masculina comúnmente sufre el proceso de afeitado. Esto supone una prueba diaria para la epidermis: es una agresión repetida en la piel que se vuelve cada vez más sensible y frágil. 

Cuando pasamos la cuchilla por la cara, eliminamos el vello, pero ocasionamos al mismo tiempo tres problemas que debemos tener siempre en cuenta:

• Las células superficiales se eliminan, lo que conlleva a  una irritación de la piel,

• La película grasa  ó manto hidrolipídico protector de la superficie se altera  lo que ocasiona que la piel se vea  deshidratada.

• Los pequeños cortes, unas veces visibles y otras no, van destruyendo la capa superior de la piel.

Pero… ¿Qué es el manto hidrolipídico? Se puede decir que es una “crema natural” que produce nuestra piel para protegerla de agresiones externas.

Este manto natural de tipo cremoso, es una emulsión que nuestra piel fábrica de manera natural. Está compuesto de agua (sudor-glándulas sudoríparas  y sebo (grasa producida por las glándulas sebáceas), es como si mezclamos agua y aceite. Este manto o capa de la piel además de protegernos de las agresiones del exterior, también mantiene el grado de hidratación de la piel y el que le da un aspecto aterciopelado.

En el hombre, afeitarse y enjabonarse alteran este manto o lo elimina parcialmente. Esto provoca una sequedad, deshidratación de la piel, sensaciones de escozor, tirantez e irritaciones.

Hoy nos centraremos tanto en el pre como el post afeitado, momentos claves que ayudarán a que luzcas una piel perfecta y con la menor deshidratación posible.

Preparando la piel

  • Lo primero que debemos tener en cuenta es que antes de comenzar a afeitarse procuremos proveernos de buenos cosméticos específicos para el afeitado. y posteriormente la buena preparación de nuestra barba. El agua caliente ayudará a abrir los poros y ablandar nuestra barba.
  • Aplicar con la mano, o con la brocha, el gel de afeitar, con movimientos circulares, al menos, un minuto, para la primera pasada de la cuchilla. Con esto conseguimos que los principales activos del producto tengan un efecto directo y eficaz sobre la piel de la cara.

 

Durante el afeitado

  • Rasurarse en el sentido del crecimiento del vello, en la primera pasada de la cuchilla. Cuando pasemos la cuchilla en un segundo momento, podemos hacerlo en el sentido contrario, puesto que el vello está más corto.
  • Si nos afeitamos de primeras en el sentido contrario del crecimiento, lo único que conseguiremos es irritar la piel, y si además lo hacemos con una cuchilla  usada, estaremos arrancando el pelo, y no cortándolo, que es lo que realmente buscamos.

 

Después del afeitado

  • Al concluir el afeitado lo primero es enjuagarse bien la cara con agua caliente para retirar cualquier resto de gel que hayamos utilizado. Lo ideal sería ponerse una toalla caliente sobre la cara, pero esto nos llevaría quizás demasiado tiempo.
  • Aplicar una loción, para calmar la irritación facial, e hidratar la piel.


Y por último, prevenir la deshidratación cutánea. El problema más común entre los hombres es la propia naturaleza de su piel. Al tener tendencia a piel grasa, muchos hombres no sienten la necesidad de aplicar un cosmético regenerador en su piel, no existe sensación de tirantez hasta que la deshidratación es profunda. No caigas en ese error de novato: cuídala



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